Hace tiempo que nos quedamos sin direcciones IPv4 para asignar. El teórico agotamiento de este vetusto protocolo ocurrió primero en Europa y después en Estados Unidos, pero alguna razón seguimos aferrándonos a él y no lo dejamos ir. Pese a que IPv6 empezó su despliegue oficial hace más de una década, una gran parte de la red mundial todavía se sostiene gracias a IPv4.
Este escenario ha dado lugar a un curioso fenómeno para cubrir la demanda: las direcciones públicas que se repartieron de manera gratuita en el pasado se están revendiendo a precio de oro. Amazon, que compró algunas de aquellas IP, ha decido trasladar parte del coste a los clientes de AWS, acto que podría ser imitado por otros proveedores.
Tocará pagar por direcciones IPv4 en AWS
La compañía explica en una publicación de blog que, a partir del 1 de febrero de 2024, todas las direcciones IPv4 públicas de AWS tendrán coste. Los clientes de la plataforma de computación en la nube de Amazon deberán pagar 0,005 dólares por hora por cada dirección asignada, ya sea que estén utilizándola o no. El coste, aunque puede parecer insignificante, no debería pasar desapercibido.
El proveedor asegura que este cambio refleja sus propios gastos y tiene como objetivo impulsar la adopción de IPV6. Como señalan en TechRadar, Amazon ha sido un gran cliente de los revendedores de IP junto con otros actores como Microsoft. Sin embargo, ha visto cómo el coste para adquirir una única dirección IPv4 ha aumentado más de un 300% en los últimos cinco años.
Cabe señalar que los clientes de AWS que utilicen direcciones IP de su propiedad, aunque sean IPv4, no tendrán cambios en su factura, es decir, no deberán pagar cargos adicionales. Recordemos que compañías del tamaño de Adobe, LinkedIn o Comcast utilizan para algunos de sus servicios la plataforma de computación en la nube de Amazon y probablemente tengan direcciones IPv4 en su propiedad.
IPv6 tiene numerosas ventajas respecto de IPv4. Se trata de un protocolo de 128 bits que debería garantizar el crecimiento de dispositivos conectados durante muchos años. Además, ha sido creado para optimizar el proceso de enrutamiento, procesar los paquetes de datos de manera más eficiente, mejorar las configuraciones de red e incluso ser más seguro.
Migrar de IPv4 a IPv6, no obstante, no es algo que se pueda hacer de un día para otro. Las compañías deben poner establecer un esquema que contemple una tradición gradual en la que posiblemente durante un tiempo coexistirán ambos protocolos. Como en cualquier tarea de este tipo, dependiendo el tamaño de la organización, se requiere de tiempo y dinero.