Vete preparando para una conexión todavía más rápida, porque el 6G está en camino y China está sorprendiendo con los resultados que ha obtenido hasta ahora. En las últimas horas han llegado noticias de cómo los especialistas chinos han conseguido hacer una transmisión inalámbrica en el nivel de frecuencia THz, alcanzando una poderosa velocidad de descarga de 300 Gbps. Mientras tanto, Estados Unidos y España preparan sus propios progresos para no quedarse atrás en la carrera por el 6G.
Quizá todavía haga poco tiempo que hayas estrenado conexión 5G, pero ya sabes que la tecnología de redes inalámbricas avanza a pasos de gigante. Y el sistema 6G ya está empezando a dar muy buenas sorpresas. Desde China, han revolucionado las noticias al conseguir trabajar en la banda de terahercios, algo que supondría un importante progreso para el sector. Otras iniciativas de las que te hablaremos ahora también están realizando sus propios avances.
China se pone a la cabeza
Desde China se ha llevado a cabo esta prueba en las últimas horas en la que el objetivo era comprobar si los progresos realizados en las frecuencias de terahercios daban sus frutos. Y los resultados son prometedores, por lo que el mundo entero ya está mirando a los especialistas chinos para ver cómo siguen trabajando en esta tecnología de altísima velocidad.
Hay que decir que el sistema todavía está en proceso de pruebas y que, por ello, no se busca alcanzar el nivel máximo de velocidad, sino que lo importante es ver si se puede trabajar con la frecuencia THz. Por ello, la prueba que se realizó fue a una velocidad de datos de 100 Gbps. Los resultados fueron buenos, puesto que se generó una velocidad de descarga de hasta 300 Gbps que podría llegar a ser incluso superior. La industria es consciente de que la banda THz es el futuro de las conexiones inalámbricas y por ello se está explorando de forma tan activa. Para entenderlo mejor, piensa que con una red 5G puedes conseguir 10 Gbps y que hoy día todavía es muy habitual incluso crear redes domésticas de fibra de 1 Gbps.
Pero todavía hay mucho trabajo que hacer. La frecuencia THz tiene obstáculos que superar, puesto que de una manera práctica se enfrenta a unos retos similares a los que tiene ante sí el 5G. Por ejemplo, es un tipo de señal que encuentra dificultades para pasar a través de la niebla y las nubes y, por otro lado, no tiene capacidad para desplazarse grandes distancias. Pero, al mismo tiempo, con los terahercios se puede proporcionar un nivel de rendimiento inalámbrico que esté a la vanguardia del mercado.
En las pruebas realizadas por el equipo chino encargado del proyecto se han conseguido resultados que, analizados en paralelo, pueden dar velocidades de descarga superiores a las que ofrece el 5G que todos conocemos. Es debido a esto que se cree que la frecuencia THz será la clave del 6G y lo que hará que el nuevo estándar se transforme en una tecnología que lo vuelva a cambiar todo. No obstante, todavía es pronto para sacar conclusiones, puesto que China cree que lo tendrá listo para 2030. Si se cumplen sus expectativas, usar la red 6G garantizará descargas 100 veces más rápidas a las que conseguimos con una red 5G.
Estados Unidos y España también progresan
En Estados Unidos han reaccionado con rapidez a las noticias procedentes de China. La Casa Blanca ha organizado un encuentro con los líderes de la industria de las telecomunicaciones, con los principales especialistas y con las entidades más importantes para poder empezar a actuar. Están viendo cómo China se adelanta de forma notable y cómo hay otros países que, como Corea del Sur, prometen que incluso tendrán su tecnología lista antes: en 2028. Por ello, no se quieren quedar atrás.
Por su lado, en España se ha presentado el proyecto Enable-6G, en el cual participan tanto Telefónica como BluSpecs y NEC Corporation en colaboración con los centros de investigación IMDEA. Su objetivo es preparar el camino para el reto que supondrá la adopción de las redes 6G con la intención de garantizar que esta tecnología proporcionará mayor privacidad de los datos, eficiencia energética y un mayor nivel de adaptabilidad. De esta forma la sociedad podrá disfrutar de tecnología añadida y tener la garantía de que aportará tanto el mayor nivel posible de protección como un perfil respetuoso con el medio ambiente.
Las empresas que forman parte de Enable-6G tienen claro lo que va a suponer la llegada futura de las conexiones 6G. Porque la entrada en el mercado del 5G ha abierto muchas posibilidades, pero algunos sectores todavía están limitados por esta conectividad. Con la llegada del 6G se acabarán las limitaciones y todo tipo de proyectos que hoy día todavía están dando sus primeros pasos, se podrán llevar a cabo en su máximo esplendor. Esto incluye ciudades inteligentes que se gestionarán de manera avanzada con todo tipo de recursos, coches autónomos más dinámicos o la cirugía remota en los hospitales. Para todo ello se necesita todavía un soporte mejor que el del 5G y todo apunta a que las redes 6G van a ser la solución. Por ahora, los resultados de la prueba de la que te hemos hablado lo confirman, pero habrá que seguir atentos para ver cómo va madurando esta tecnología.
