Es posible que te hayas preguntado alguna vez porque los discos duros HDD tienen más capacidad que los SSD. Actualmente, podemos encontrar unidades HDD de hasta 18 TB, pero los SSD están limitados a 4 TB. Pues bien, los motivos de estas limitaciones de capacidades en los SSD, tiene que ver bastante con sus características.
Son varios los motivos por los que existe tal diferencia de capacidad, pero entre las más destacadas está el tamaño de las unidades. También debemos tener en cuenta que los HDD llevan mucho tiempo en el mercado y hasta hace no mucho, la capacidad no pasaba los 8 TB.
Los SSD tienen dos problemas: tamaño y tecnología
No vamos repasar todas las ventajas que tienen los SSD frente a los HDD, a los cuales ganan en casi todo. Solo hay una cosa en la que un SSD es peor que un HDD: la capacidad. El gran problema de los discos duros de estado sólido es que su capacidad es menor. Incluso, el precio de un SSD de 1 TB puede ser el doble de caro que un HDD o más.
Pues bien, la parte que los hace mejores que los HDD, como son los chips de memoria, son su gran problema. Los chips de memoria de los SSD se ven limitados por las técnicas de fabricación. El número de capas y el número de bits por celda establecen el límite técnico actual de capacidad de los SSD. Pero no es el único factor que los limita, ya que la temperatura y el espacio son otros dos factores.
Los SSD tienen problemas importantes de temperatura, sobre todo en las unidades M.2 PCIe (las que se montan sobre la placa base). Además, este formato de estas unidades de almacenamiento limita enormemente la capacidad. Estos dos factores impiden que tengamos SSD de mayor capacidad, ya que el espacio es muy limitado y cuantos más chips de memoria, mayores problemas de refrigeración.
Hay más en este sentido. Las controladoras son otro limitante, ya que en los SSD deben tener el desgaste de las celdas, algo que no pasa en los HDD. Escribir todo el rato en la misma zona puede desgastar excesivamente el SSD y dañarlo. Realmente en los HDD esto no sucede, ya que simplemente se escribe de manera aleatoria en los espacios en blanco. Lo que se desgasta en los HDD es el brazo magnético de lectura y escritura, y no hay modo de corregir el problema.
¿Tienen solución estos problemas?
Pues a corto y medio plazo, parece que no existirán cambios. Veremos HDD en los próximos años con capacidades de más de 18 TB, pero de momento los SSD parecen estancados en los 4 TB. Si bien hay fabricantes que hablan de M.2 de hasta 8 TB, los precios serían ridículamente grandes.
Debemos tener en cuenta que los formatos M.2 de los SSD limitan mucho las posibilidades. El mercado se mueve hacía una «desaparición» de los SSD de 2.5 pulgadas con interfaz SATA, la cual está obsoleta totalmente. No solo limita el tamaño de estos discos duros, también los importantes problemas de temperatura, que con PCIe 5.0 irán a más.
Incluso, podríamos decir, que los fabricantes trabajan más en mejorar la tecnología pare reducir precios que aumentar la capacidad. De todos modos, los SSD M.2, pese a tener menos capacidad que los HDD y ser técnicamente más caros, las velocidades que ofrecen compensan.