La unidad alcanza velocidades de lectura de hasta 7500MB por segundo.
El PNY CS3140 es un disco SSD M.2 NVMe, o sea, que es un disco SSD con un factor de forma M.2 que se conecta a la placa usando alguno de los puertos de expansión homónimos. Las ranuras tipo M.2 soportan diferentes tipos de dispositivos, pero en los últimos años se están usando sobre todo para instalar estas pequeñas unidades de disco en estado sólido. Las ventajas de usar este conector no son pocas. Para empezar, su instalación es más sencilla y limpia porque la unidad es mucho más pequeña, va ubicada sobre la placa base (no hay que llevar ningún componente hacia atrás) y no necesita de cables adicionales. El puerto M.2 le proporciona toda la energía que requiere.
La segunda ventaja es que los M.2 soportan tanto el estándar SATA como PCIe (Peripheral Component Interconnect Express) que es mucho más rápido en términos de transferencia. Eso sí, no todas las unidades son iguales. Qué interfaz usa cada disco es algo que depende del modelo. Algunas unidades M.2 usan SATA, pero limitarnos al SATA en un M.2 no tiene mucho sentido porque su velocidad es equivalente a la de los SSD SATA convencionales de 2,5 pulgadas. Lo único que ganas instalando una unidad SATA en el puerto M.2 es un interior de la CPU más limpio, ordenado y bien ventilado.
Para aprovechar toda la velocidad de transferencia del puerto M.2, los SSD con este factor de forma suelen conectarse a la placa mediante el estandar PCIe, y aquí es donde entran en juego las siglas NVMe (Non-Volatile Memory Express). Se trata de un protocolo que permite a la unidad operar sobre PCIe y multiplicar sus velocidades de lectura y escritura sobre las de un SSD SATA convencional. También son típicamente más costosos que un SSD de 2,5 pulgadas. Si quieres toda esta explicación en vídeo, este de Newegg Studios es la mejor que he visto hasta la fecha (en inglés).
Ojo con la placa
Esta advertencia es aplicable a cualquier componente que vayamos a instalar. En el caso concreto del CS3140, hablamos de una unidad de última generación que soporta la versión más reciente de NVMe (la 1.4). PNY especifica una velocidad máxima de lectura de 7500MB por segundo, y una velocidad de escritura máxima de 6850MB por segundo. Eso es, de nuevo según la compañía, hasta 13 veces la velocidad de un SATA medio.
El problema es que mi placa (Una MSI MPG Z490) solo soporta NVMe sobre PCI 3.0 x4, lo que limita la velocidad máxima que puedo sacarle a la unidad. No obstante, sigue siendo mucha más de la que me ofrece el SATA. Otro detalle interesante es que la primera ranura M.2 de mi placa no es compatible con SATA 2. Es algo que no me afecta en este caso, pero sirva como recordatorio de que leas bien el manual de tu placa base antes de comprar nada.
Instalando el CS3140
Instalar un disco M.2 en un PC de sobremesa es un proceso absolutamente disfrutable. Basta con quitar la tapa lateral de la CPU, extraer el disipador que tapa el puerto M.2 (si lo hay) conectar la unidad y fijarla en su sitio con un tornillo. La mayor parte de placas tienen varios agujeros para esto dependiendo de la longitud del dispositivo M-2 que estemos instalando. En el caso del CS3140 hablamos de un 2280 (22mm de ancho y 80 de largo).
Todo esto, como digo, hubiera sido disfrutable, a menos por supuesto que no haya tornillo.
Por alguna razón que se me escapa, el PNY CS3140 no incluye tornillo de fijación en su embalaje. No estoy seguro de si esto se debe a que la compañía no lo considera necesario o es que el mío se escurrió de la caja en algún momento. El caso es que no estaba. Mi problema aquí era que no podía usar el tornillo del disipador que quité porque es un tornillo cautivo que no se puede extraer. Eso me dejó en manos de la fiel caja de piezas sueltas que atesoro desde hace años. Por fortuna, tenía un tornillo que encajaba, pero era demasiado largo y tuve que añadirle un retenedor de goma para compensar el exceso de longitud. No recomiendo en absoluto instalar la unidad sin tornillo de fijación, especialmente si viene con disipador, porque el peso de la rejilla (43 gramos) hace que el disco se incline hacia afuera de la placa si no lo sujetamos apropiadamente.
El problema no fue más allá de unos minutos de búsqueda y unas cuantas maldiciones por lo bajo, pero si efectivamente no meter tornillo es una decisión consciente por parte de PNY, quiero hacer constar que me parece una decisión muy equivocada. Genera un problema absolutamente innecesario y evitable que afea un dispositivo que, por lo demás, es de gama alta.
En términos de rendimiento, Las velocidades de lectura y escritura están limitadas por mi placa base, pero aún así alcanzan el máximo de lo que es capaz mi PC. PNY no ofrece datos concretos sobre mover archivos en alta definición, pero por las pruebas con CrystalDiskMark 8 sobre estas líneas parece que se defiende bastante. Desde luego, sus cifras son muy superiores a las del Sandisk Extreme Pro NVMe de 1TB que uso en la otra ranura como unidad principal y cuyo análisis llegará pronto..
Precio con o sin disipador
El precio del PNY CS3140 en Amazon al cierre de este análisis era de 288 euros para la versión de 1TB (la que he probado) y de 494 para la de 2TB. En ambos casos, estos precios se refieren a la versión con disipador. El PNY CS3140 se vende en dos versiones, con o sin disipador. El disipador es una hermosa pieza de aluminio anodizado en negro que cubre por completo la unidad, y que fue la responsable del comentario sobre The Expanse cuando la enseñé en casa. La mala noticia es que el disipador integrado no es barato. La versión de 1TB del CS3140 sin disipador cuesta 228 euros. La de 2TB sin disipador cuesta algo más cara (534), lo que no parece tener mucho sentido a menos que Amazon tenga problemas de stock con esa unidad concreta.
¿Es necesario el disipador? La respuesta es que es conveniente un disipador, pero no tiene por qué ser el que ofrece PNY. La rejilla de aluminio está sujeta mediante dos hileras de tornillos y unas abrazaderas laterales, y se puede desmontar. Todo depende de dónde vayas a conectarlo y si de dispones de un disipador propio. En mi caso lo conecté a la primera de mis dos ranuras M.2, que ya traía un disipador de aluminio que tuve que desmontar (se suelta simplemente desatornillando). Sin embargo, si hubiera tenido que montar el CS3140 en la segunda ranura M.2 hubiera tenido problemas. Justo sobre esa ranura está la Soundblaster Z SE, y el disipador es demasiado grande como para conectar las dos cosas a la vez. En este caso hubiera tenido que quitarle el disipador y funcionar sin él, lo que no es ideal.
En resumen
El PNY CS3140 es mucho más de lo que necesito en mi PC. Sin embargo, en placas base adecuadas, la velocidad de la unidad es mucho más cercana a la que dicta el fabricante. Los usuarios profesionales que trabajen con vídeo o los gamers más serios le pueden sacar chispas. Es una unidad que no está pensada solo para almacenamiento opara instalar un sistema operativo, sino para ejecutar software pesado, o procesar vídeo en 4K y 8K.
A la hora de comprar unidades de disco, su durabilidad a largo plazo siempre es un factor imposible de medir en las reviews. El disipador debería ayudar a reducir el estrés de los componentes tras largas sesiones de uso. Con todo, PNY ofrece una garantía de cinco años con el CS3140, un colchón que da bastante tranquilidad a la hora de optar por este modelo en un mercado, el de los SSD de este tipo, bastante saturado ya con opciones muy buenas.