Es posible que, de un día para otro, la conexión a Internet empiece a dar problemas. Por tanto, si te estás preguntando: ¿por qué se conecta y desconecta Internet? Aquí puedes encontrar una solución. Y es que, este problema no es nada nuevo, una conexión inestable puede darse en cualquier momento. Pero, por suerte, existen diferentes comprobaciones que nos ayudarán a corregir este problema.
En este caso, no es que deje de funcionar la conexión a Internet, sino que se conecta y se desconecta en diferentes momentos del día o puede darse únicamente una vez cada poco tiempo. En cualquier caso, hay una serie de soluciones con las que podemos arreglar este inconveniente para que la red no siga teniendo este problema.
Los motivos de una conexión inestable
Que la conexión a Internet se caiga por sí sola y a los segundos o minutos vuelva, no es normal. Esto suele darse cuando hay algún problema de por medio. Pero, ¿cuál es el motivo que ha provocado esto? En realidad, no hay un único motivo, sino que son varios los que podrían haber causado esta conexión inestable. Por tanto, debes tener en cuenta que puede darse por todo lo siguiente:
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Fallo puntual en el router.
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Problema en la red del operador que tienes contratado.
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Culpa del propio dispositivo que tenemos conectado a Internet.
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Problemas con los cables del router.
Y, aunque estos son algunos de los principales motivos, lo cierto es que no son los únicos que pueden haber afectado a la conexión a Internet de casa. Por ejemplo, también es posible que la mala localización del router sea el culpable, pero esto dependerá de si te pasa desde siempre o ha comenzado ahora. O, en otro caso, puede que el problema se esté dando en un único dispositivo, como en el ordenador que estamos utilizando.
Todas las soluciones
Uno de los primeros pasos que debemos llevar a cabo, para comprobar cuál es el verdadero culpable, es hacer un test de velocidad de la conexión a Internet. Más que nada, porque nos puede servir para saber si es un fallo de la red del operador o no. Si va bien en ese momento, pero sigues experimentando cortes de Internet, ahora toca revisar los cables del router y los dispositivos que están conectados a la red. En el caso de los dispositivos, prueba a reiniciarlos.
Si en tu caso, sigue el problema, toca ponerse en contacto con el operador de fibra o ADSL que tiene contratado para revisar que no sea un fallo en su red. Sin embargo, si este no es tu problema, nos quedan las siguientes soluciones:
Mala ubicación del router
Este fallo se tiene que dar desde el principio, es decir, desde el día en el que te colocaron el router. Básicamente, porque si estamos lejos del WiFi, la conexión se puede desconectar y conectar. Y, además, notaremos que la velocidad es lenta.
Revisa las luces del router
Dependiendo del modelo, las luces del router significarán una cosa u otra. Por lo que, en estos casos, lo ideal es recurrir al manual que tenía que venir en la caja del dispositivo. Si compruebas que las luces marcan una anomalía en la red, habrá que llamar al operador.
Reiniciar el router
Apaga el dispositivo y espera unos 10 segundos aproximadamente para encenderlo. Cuando las luces comienzan a parpadear es porque se están realizando una serie de comprobaciones. Cuando se queden fijas (normalmente en color verde) significa que todo funciona correctamente.
Comprueba los cables
Uno de los grandes inconvenientes que no tenemos en cuenta es el cable de fibra. Más que nada, porque si se dobla mal, se puede llegar a estropear con el paso del tiempo. Por lo tanto, comprueba que está bien. Además, si tenemos mascotas por casa, puede que hayan mordido los cables y no nos hayamos dado cuenta.
Saturación en la red
Esto puede darse en aquellos momentos en los que tengamos muchos aparatos conectados. Es más común en routers más antiguos, pero para solucionarlo, lo que tendremos que hacer será desconectar varios dispositivos de Internet.
Adaptador inalámbrico del dispositivo
Por ejemplo, si estamos conectados al WiFi en un ordenador o portátil y ha comenzado a desconectarse por sí mismo. En ese caso, hay que comprobar que el adaptador inalámbrico del dispositivo está funcionando. Puede darse que el problema esté en el hardware del propio dispositivo o en el firmware. Desde el panel de las conexiones o Administrador de dispositivo podremos ver si está deshabilitado o al hacer una comprobación de los componentes del ordenador, nos podrá decir sí hay algún problema.